El derby entre Real Madrid y Atlético de Madrid volvió a ser lo de siempre: la historia interminable. Ya van 12+1, y no me refiero a los campeonatos del motociclismo de nuestro excelentísimo Ángel Nieto, sino a los años que llevan los rojiblancos sin conseguir el triunfo frente a su eterno vecino y rival. Ocurrió el 20 de octubre del año 1999, en aquella victoria de los colchoneros por 1-3 con la soberbia actuación de Jimmy Floyd Hasselbaink.
Este sábado Cristiano Ronaldo contribuyó a revivir los sucesos del pasado, tras volver a encontrarse con el gol después de una pequeña sequía goleadora. El portugués marcó de falta, algo que no conseguía curiosamente desde el último duelo en el Vicente Calderón frente al Atlético, de la temporada pasada.
El 1 de diciembre los compañeros de Fiesta fm pusieron el escaparate comunicativo en el Estadio Santiago Bernabéu, para que las voces de Aitor Puerto, Norberto Latorre y un servidor transmitieran 90 minutos de pura rivalidad.
Listas
y listas interminables de futbolistas que pasarán a la historia por haber sido
reconocidos como contundentes físicamente ante sus oponentes. Tardelli, el
inglés Willie Woodburn, Basile Boli, Suart Pearce, Andoni Goikoetxea, Pablo
Alfaro, Marco Materazzi, Denis Wise, Roy Keane, Javi Navarro, Pepe... y seguro
que os sonará Juanma López, más conocido como Superlópez.
El
ex futbolista del Atlético de Madrid, uno de los más ilustres para la afición
colchonera, nació en la capital el 3 de septiembre de 1969. Desde bien pequeño,
se formó en las categorías inferiores del club rojiblanco para dar el salto al
primer equipo en el año 1990. Once temporadas en las filas atléticas
convirtiéndose en el jefe de la defensa del conjunto de manzanares. Con el club
de sus amores logró tres Copas del Rey y una liga; esta última lograda en la
temporada 1995/96 de la mano de Radomir Antic en el famoso doblete del
Atlético.
En
el verano de 1992, conquistó la medalla de oro con España en los Juegos
Olímpicos de Barcelona. Uno de los recuerdos más dulces para el defensa de la
melena morena. En aquel equipo acompañaron
López, jugadores que años más tardes se convertirían en leyendas de
nuestra liga. Hablamos de mitos como Josep Guardiola, Alfonso Pérez
Muñoz, Kiko Narváez, entre otros.
En
la actualidad ejerce como representante de futbolistas, trabajo que le sirve
para continuar vinculado al mundo del balompié y quitarse así la fama de tipo
duro. De hecho, el ex central del Atlético de Madrid siempre contestó a su fama
de acumulador de tarjetas, recordando que él nunca lesionó a nadie y que sin
embargo a él sí le fracturaron el pómulo. En una de sus últimas intervenciones
en televisión, hace ya algo más de un año, el símbolo de la afición atlética reconocía en su parcela laboral como
representante, que veía al Kun Agüero
vestido de blanco la próxima temporada.
Os preguntaréis quién es. Muchos ya lo sabréis, pero para los despistados, no se trata de Jordi Sánchez, cantante del grupo de Techno-pop y Electro pop,OBK, sino del máximo goleador en la historia de la selección argentina,Gabriel Omar Batistuta. Más conocido comoBatigol, el ex futbolista de la Fiorentina, entre otros equipos, podría haber dado el pego perfectamente como un príncipe, dada su elegancia fuera de los terrenos de juego, pero se quedó con ella dentro de los campos de fútbol.
A sus 43 años, es el actual manager del Club Atlético Colón, equipo perteneciente a la ciudad de Santa Fe, Argentina, y que milita en la máxima categoría del fútbol argentino. Gabriel aportó para la albiceleste, nada menos que 56 goles en 78 partidos, convirtiéndole en el jugador ilustre por excelencia para su país. De hecho, tan buen resultado le dio su promedio goleador, 0,72 tantos por encuentro, que es en la actualidad el séptimo goleador en la historia de los mundiales y el argentino que más dianas anotó, un total de 10. Sus tres participaciones en las copas del mundo de USA’94, Francia’98 y Corea-Japón’02 le avalan como uno de mejores atacantes que ha dado este deporte.
Inició su carrera en la Primera División de Argentina, en el Newell’s Old Boys, durante la temporada 1988-99. Un único año que le sirvió para dar el salto a uno de los grandes, los millonarios de River Plate. Un rendimiento de tan sólo 8 goles, propinó a que en la temporada siguiente fichará por el eterno rival, el Boca Juniors. Colores que defendió con profesionalidad y que le sirvieron para alcanzar una cifra goleadora más que respetable, 19 tantos durante la campaña 1990-91.
Llegó el turno de Europa, el argentino se había consagrado en el fútbol sudamericano, pero le quedaba lucirse en el escaparate más prestigioso, en el del viejo continente. Aterriza en la Fiorentina durante el verano de 1991. En el conjunto de la Serie A, el argentino se convirtió en uno de los mejores futbolistas extranjeros que ha pasado por Italia. La campaña 1994-95, le consagró como tal, obtuvo el reconocimiento del máximo goleador del Scudetto con 26 goles, sin olvidar el récord de 11 partidos consecutivos marcando. Nueve temporadas en la Fiore, a razón de 207 tantos en un total de 332 encuentros acumulados con los lilas. En la campaña 1995-96, de la mano de Claudio Ranieri, Batigol saboreó las mieles de la victoria con la conquista de la Copa y Supercopa italiana.
A mediados del año 2000, Batistuta de la melena dorada, abandona la Fiorentina para recalar en las filas del AS Roma. En un equipo liderado por el experto de las competiciones ligueras, Fabio Capello, Batigol amplía su palmarés con la conquista de la Serie A, y tres meses más tarde, con la llegada de la Supercopa Italiana a la capital italiana. Tres temporadas en las filas romanas con 33 goles sumados. En enero del año 2003, tuvo un paso fugaz durante media temporada por el Inter de Milán. El argentino, a sus 34 años, comenzó a plantearse el final de su carrera: 2 goles en apenas 12 encuentros disputados con los milaneses.
El verano de ese mismo año, se oficializó su fichaje con el club catarí Al-Arabi. Militó durante una temporada en una liga de menor competitividad, pero con un coeficiente goleador muy a su nivel, a un gol por partido, en los 26 que disputó. Al igual que le sucedió al Cisne de Utrecht, Marco Van Basten, sus maltrechos tobillos le obligaron a retirarse. A diferencia del holandés, que lo hizo con 29 años, el argentino colgó las botas a los 36 inviernos.
En su jubilación hizo sus pinitos en el mundo del Polo, en las filas del Club Atlético Boca Juniors. Con los argentinos, alcanzó incluso su primer título en esta modalidad, la copa Stella Artois.
Batistuta será recordado como uno de los mejores goleadores, sí, pero también como uno de los atacantes más elegantes que ha regalado el fútbol. En su carrera jamás le faltaron los halagos futbolísticos, y menos las distinciones como deportista. Muestra de ello, son los númerosos premios obtenidos: máximo goleador de la Copa América (6 goles) de 1991, premio al RSS al mejor futbolista del año (2do lugar) en 1998, Bota de plata en el mundial de Francia’98 (5 goles), ganador como el tercer jugador mundial de la FIFA en 1999, galardonado en 2004 como uno de los futbolistas FIFA 100, entre otros premios.
Una lista interminable de reconocimientos, sin olvidar, a que es el máximo goleador en la historia de la Fiorentina con 207 dianas. Es tal el cariño que le tienen en Florencia, que en el año 2006 recibió las llaves de acceso a la antigua ciudad italiana. Gabriel Batistuta, un futbolista que consiguió un total de 355 goles en los 633 partidos que disputó como profesional, 355 razones para recordarlo como uno de los eternos.
Cuando era pequeño me encerraba en mi habitación, comprobaba por eso, minutos antes, que no hubiese nadie en el resto de la casa. Era entonces cuando agarraba el mando de la Super Nintendo y comenzaba a contarme ese partido ficticio que veía en un televisor diminuto. Sabía que pese a que yo fuera mi único oyente, aquello me satisfacía.
Años más tarde, tras experimentar mis narraciones en la emisora de mi pueblo, Granollers, localidad perteneciente a Barcelona, el esfuerzo y la paciencia comenzaban a recorrer un largo camino hasta llegar a pisar algún día, uno de los escenarios grandes.
Hará ya un par de meses cuando el estadio de Santo Domingo, escenario deportivo de la AD Alcorcón, abrió sus puertas a un joven de 28 años para que disfrutara de los goles de la Liga Adelante. Hasta entonces, había disfrutado con la final del europeo femenino sub-19, disputado en Antalya (Turquía), entre España y Suecia, o el placer de locutar los tests de verano de Real Madrid y Barça.
Pues bien, el pasado 11 de noviembre, subí las escaleras del Vicente Calderón con destino a instalarme en una de sus cabinas y narrar así, el encuentro de la Liga BBVA entre Atlético de Madrid y Getafe. Para la aventura me acompañaron un amigo y compañero de profesión como es Aitor Puerto, y la voz latina por excelencia en Madrid, Norberto Latorre.
Hoy retomamos el segundo capítulo de la noticia de la semana. En Can Barça, desde hace ya más de dos semanas, retumban los ecos de las diferencias entre el astro argentino, Lionel Messi, y el asturiano David Villa. En el último partido de Champions League entre Celtic de Glasgow y Barça, las miradas desafiantes entre ambos futbolistas se volvieron a cruzar cuando el asturiano no le pasó el balón en una ofensiva de los de Tito Vilanova.
Con puro sabor a café colombiano, presento hoy a Faustino Asprilla . Nacido el 10 de noviembre de 1969 en Tuluá, Valle del Cauca, en Colombia. El ex delantero de Parma y Newcastle, formó parte de la gran generación de futbolistas colombianos de finales de la década de los 80 y comienzos de los 90. Hablamos de futbolistas de la talla de Carlos Valderrama, el incombustible René Higuita, Arnoldo Iguarán, el ex jugador del Real Madrid Freddy Rincón, Leonel Álvarez, el ex colchonero Adolfo el Tren Valencia, entre otros.
Su reconocimiento deportivo llegó en Europa, donde ganó cinco títulos con el Parma italiano, sumado a la participación en los mundiales de USA’94 y Francia’98, le llevó a ser considerado como uno de los cinco mejores futbolistas de la historia de la División Mayor del Fútbol Colombiano.
Sus primeros pinitos como futbolista fueron en la Escuela Carlos Sarmiento Lora. Poco después acabaría fichando por el Cúcuta Deportivo colombiano. Dos temporadas en el Deportivo con un notable rendimiento: 17 goles en 36 encuentros sumados. Cambió de aires en la temporada 1990-91 para recalar en el Atlético Nacional de Colombia. Dos temporadas a razón de 32 goles en 75 partidos que le sirvieron para dar el salto a Europa.
Llegó a Italia en el año 1992 para demostrar sy gran despliegue físico en el Parma. Cuatro temporadas a cargo del técnico Nevio Scala. Aterriza a un equipo que llevaba dos temporadas en la Serie A y que había conquistado su primer título: la Copa de Italia, después de vencer en una doble final a la Juventus de Turín. Recién llegado pierde la Supercopa italiana ante el todopoderoso Milán de Fabio Capello, pero finaliza el año logrando el primer gran título internacional para los italianos, nada menos que la Recopa de Europa. Eso ocurre en el mayo de 1993, porque tres meses después, llega el segundo título continental para el colombiano, la Supercopa de Europa.
Siguió creciendo de la mano de Scala, en la temporada 1994-95, llega la Copa de la UEFA, venciendo a la Juventus, que le había arrebatado tres títulos relevantes como son el Scudetto, la Copa y Supercopa de Italia. Permaneció una temporada más en Italia, año que le sirvió de punto de inflexión para los emilianos, puesto que se quedaron sin saborear más triunfos. Finalizó así su primera gran etapa en el conjunto italiano, coincidiendo también con la marcha del gran Nevio Scala. Cuatro temporadas de oro en las que compartió vestuario con jugadores como Verón o Crespo. Temporadas en las que fue nominado en dos ocasiones para el Balón de Oro, la 94 y 95, y que rindió con 25 goles en 84 partidos. Números que podría haber mejorado si no llega a ser por la relación sentimental que mantuvo con la actriz porno Petra Scharbach; su rendimiento cayó a gran escala.
En el verano de 1996 decidió cambiar de aires para probar en la Premier League. El Newcastle se convirtió en su nuevo equipo. Militó con los ingleses durante dos temporadas y una lesión de rodilla provocó un rendimiento muy por debajo de sus posibilidades: nueve goles en 48 partidos. Sim embargo, los aficionados a las noches mágicas de la Champions League recordarán la brillante actuación que tuvo al marcar un hat-trick ante el F.C. Barcelona de Louis Van Gaal en la fase de grupos.
Decidió volver en 1998 a su querido Parma. Trabajó a las órdenes del italiano Alberto Malesani, con la fortuna de volver a la senda de los triunfos gracias a la consecución de la Copa de la UEFA. Primer título, después de tres años de sequía para los italianos, coincidiendo con el último que conquistó el colombiano en Italia. Sus lesiones le perjudicaron en su rendimiento, apenas anotó tres goles en 22 encuentros acumulados.
En el año 1999, cruzó el charco hacia Sudámerica para experimentar la liga brasileña durante dos temporadas; la primera en el Palmeiras y la segunda Fluminense. 24 partidos totales con 3 y 8 goles, respectivamente.
A partir de ese momento, Asprilla con 31 años, camino de los 32, se planteó jugar en ligas de menor intensidad física. El Atlante de México, nuevamente el Atlético Nacional colombiano, el Universidad de Chile y el Estudiantes de La Plata argentino, fueron sus nuevos destinos. Una temporada en cada país para conocer las nuevas geografías. Ocho goles en cuatro años que significaron el adiós definitivo de Faustino Asprilla como futbolista.
En la selección colombiana aportó una estadística goleadora respetable. Sumó 20 goles en 57 presencias con su selección, los más recordados los dos tantos anotados el 5 de septiembre de 1993 a Sergio Goycochea, en la goleada histórica de Colombia por 0-5 sobre Argentina en el famoso Monumental de Núñez.
En la actualidad reside en su ciudad natal de Tuluá, donde es el director de varias escuelas de fútbol. En una entrevista concedida al medio argentino de La voz, confesó que su mayor ilusión sería el de ser dueño de un club de fútbol.
La información deportiva se estanca en ocasiones, y es cuando aparecen las polémicas hasta debajo de las piedras. Presento a continuación la nueva sección de Los últimos serán los primeros titulada: ¿Esto es verdad?.
La cantera del Real Madrid ha vuelto a ser noticia esta semana, debido al enfrentamiento entre José Mourinho, técnico del Real Madrid, y Alberto Toril, entrenador del Real Madrid Castilla. Sin más preambulos, analizamos a continuación el enfrentamiento Mou-Toril.
El baúl de los recuerdos se vuelve a abrir. Esta vez para recordar a otro futbolista ilustre que también estuvo presente en la década de los 90 y parte del 2000. Es considerado el mejor croata que ha pasado por la liga española, y para muchos compatriotas suyos, el mejor jugador del país balcánico. Sin más preámbulos, él es Davor Suker, nacido el 1 de enero de 1968 (44 años) enOsijek, perteneciente a la antigua República Federal
Socialista de Yugoslavia, en la actualidad República Socialista de Croacia. Jugó
como delantero en el Sevilla, equipo al que le debe su éxito, para recalar y
consagrarse, años más tarde, en el Real Madrid, con quien consiguió la
Champions League en 1998. Fue el mismo año en el que le premiaron con la bota
de oro del Mundial de Francia. Por aquella época su relación sentimental
conAna Obregón, provocó que se convirtiera en la diana de
la prensa del corazón.
La trayectoria del ex futbolista se originó en 1984 en el
Osijek FC, equipo local de su ciudad. Sus buenas actuaciones le impulsaron a
que fichara por el Dinamo de Zagreb cinco años más tarde. Un par de temporadas
en el club croata, las cuales coincidieron con el inicio de la Guerra de
Yugoslavia en el año 1991. Suceso histórico que provocó la desintegración de la
mayoría de las entidades constitutivas del país, entre ellas la actual RS de
Croacia.
Tras el inicio de la catástrofe bélica, Suker recaló en España para jugar en el Sevilla FC.
Durante cinco temporadas se convirtió en uno de
los extranjeros más prestigiosos que ha dado la liga española. Sus 76 goles con
la camiseta hispalense sirvieron para alzar al croata a la cima del fútbol
europeo.
En el verano de 1996 fichó por el Real Madrid, gestión que llevó a cargo para aquel entonces
presidente club blanco,Lorenzo Sanz. Esa temporada Suker compartió vestuario con
futbolistas de la talla de Raúl, Pedja Mijatovic, Clarence Seedorf, Roberto
Carlos, Bodo Illgner o Christian Panucci. Los últimos cinco, fueron también
contratados en el mismo verano por el mandatario blanco. De la mano deFabio Capello, el Real Madrid conquistó la liga española ante
el Barça deBobby Robson y deRonaldo. Un año en el que el Real Madrid permaneció
imbatido durante las primeras 24 jornadas y en la que Suker acabó con 24
tantos, 10 menos que el pichichi de aquella liga, Ronaldo Luís Nazario.
En la siguiente campaña con la marcha de Fabio Capello, Jupp Heynckes tomó
el mando del vestuario blanco. Año fructífero para Suker, consiguiendo la
ansiada séptima Copa de Europa para los blancos y la Copa Intercontinental y, el
tercer puesto en el mundial de Francia’98 con la correspondiente bota de oro
gracias a los 6 tantos obtenidos.
Después de tres temporadas
en el Real Madrid y 38 goles en 78 partidos disputados, se marchó a jugar a la
Premier League, en las filas delArsenal. Estuvo una
temporada con un rendimiento muy por debajo de sus posibilidades; ocho goles
en 22 encuentros jugados. Tras estar en los Gunners,
recaló en elWest Ham, pero su
nivel futbolístico fue decayendo a gran escala: 3 goles en apenas 8
partidos. Terminó su carrera deportiva en Alemania, en las filas delTSV 1860
München.Acumuló
cinco tantos en 26 partidos sumados con los blanquiazules.Culminó así la carrera
futbolística de Davor Suker,un croata que aportó 46 goles
con su selección, 45 de ellos para Croacia, que sigue siendo el mayor goleador
de la historia de Croacia, y que en marzo de 2004, fue elegido por Pelé entre
los 125 mejores futbolistas de la historia.
En la actualidad, Suker es el director de unas escuelas
deportivas de fútbol para la enseñanza a niños. El 5 de julio de 2012 fue
elegido Presidente de la Federación de Fútbol de Croacia (NSH), en sustitución
de Vlatko Markovic. Con el actual cargo, se hizo responsable de su primera
decisión relevante, la elección del nuevo seleccionador croata. El exfutbolista
del Real Madrid elegió aIgor Stimac como
nuevo encargado de Croacia, tras la destitución de Slaven Bilic. Los croatas
esperan de Suker y del ministro de Deporte del país,Zeljko
Jovanovic, la limpieza del
fútbol de la república de los escándalos de apuestas ilegales, la crisis
económica que salpica a los clubes, entre otros asuntos.
Los que pertenecemos a la generación de los 80 nos gusta recordar a futbolistas que han tenido el lujo de jugar la década de los 90 y alguños años del 2.000. Jugadores que han marcado una infancia y que presumes de ellos hablándoles a los más jóvenes. Recuerdos de jugadores como Julio César Dely Valdés, más conocido como Dely Valdés. Este panameño, nacido en Colón, Panamá, el 12 de marzo de 1967, marcó una época en el fútbol español en equipos como el Real Oviedo y el Málaga. Nacionalizado español y hermano de los también futbolistas Jorge Dely Valdés y Armando Dely Valdés, fue nombrado mejor deportista panameño del siglo XX. Un delantero destacado por su mejor cualidad, el remate de cabeza.
Su debut futbolístico fue en el Atlético Colón de Panamá. Tras probar sin éxito en Argentinos Juniors, fichó por el Deportivo Paraguayo, equipo perteneciente a la Primera D argentina. Después de una temporada, dio el gran salto incorporándose al Nacional de Uruguay. Es con este conjunto cuando consigue su primer título, el Campeonato Uruguayo de Fútbol. Su gran rendimiento en el club provocó que en Europa se fijaran en él. Dio el salto al viejo continente para fichar por el Cagliari italiano. Un paso fugaz por el club rojiazul para acabar recalando en el París Saint-Germain. En el club parisino conquista en 1992 la Recopa de Europa.
Llega a España en la temporada 97/98 para jugar en las filas del Real Oviedo, para aquel entonces equipo entrenado por el uruguayo Óscar Washington Tabárez. No fue hasta la segunda temporada en el club asturiano cuando explota como jugador en la liga de fútbol profesional. De la mano de Fernando Vázquez, asume la responsabilidad goleadora y finaliza la temporada con 19 tantos, una marca que rememoró a viejas glorias del club como Carlos u Oli. Compartío vestuario con jugadores ilustres como el guardameta Esteban, el argentino “el Tito” Pompei, Frank Rabarivony o el delantero danés Peter Möeller. Permaneció en el club blanquiazul hasta el año 2001, época de la final de etapa de un club histórico como el Real Oviedo en primera.
En el verano del mismo año ficha por el Málaga C.F., club al que le debe gran parte de su reconocimiento como futbolista. Consiguió en el combinado de la capital de la Costa del Sol la Copa Intertoto, después de ganar al Villarreal en la final y dando así al club la posibilidad de jugar la antigua Copa de la UEFA. Los andaluces, con Joaquín Peiró de entrenador, alcanzaron los cuartos de final donde perdieron en la tanda de penaltis frente al Boavista de Oporto en la ciudad lusa. Los aficionados malaguistas no olvidarán jamás el once tipo de aquel conjunto formado por Contreras; Josemi, Fernando Sanz, Roteta, Valcarce; Manu Sánchez, «Gato» Romero, Sandro, Musampa; Darío Silva y Dely Valdés. Es junto al uruguayo Darío Silva, cuando forma una de las mejores duplas de atacantes que han pasado por nuestra liga, la conocida como la Doble D. De hecho, el panameño es en la actualidad el máximo goleador de la historia del Málaga en Primera División.
Tras dejar España, volvió al Nacional de Uruguay y colgó las botas, más tarde , en el Árabe Unido de Colón. Acumuló a lo largo de su carrera más de 200 goles. Su mejor estadística fue en el Nacional de Montevideo, sumó 110 tantos,convirtiéndose en el futbolista más importante del club uruguayo en la década de los 90, junto a jugadores de la talla de Hugo De León, Rubén Sosa, entre otros.
Su paso por la selección de su país fue glorioso. Como uno de los mayores goleadores, ayudó a Panamá a participar en las fases de clasificación para los mundiales, desde 1990 hasta el año 2006. Jugó con la selección panameña la Copa de Oro de 2005, logrando el subcampeonato y siendo este el mayor logro del fútbol panameño de la historia.
En los últimos años hemos visto a Dely Valdés ejerciendo como entrenador. De las etapas más conocidas, el de segundo hombre en el Málaga CF. Tras dos años en el club, la llegada del nuevo dueño, el jeque qatarí Abdullah ben Nasser Al Thani, y la posterior estructuración del club, provocó que el 16 de junio del 2010 dejara su cargo. En la actualidad, es el seleccionador de su país, cargo que ostenta desde el 14 de septiembre de 2010. La trayectoria de Panamá hacia Brasil 2014 es excelente, a falta de una última cuarta ronda, el combinado centroamericano ocupa en la CONCACAF la primera posición del grupo 3 con 11 puntos, seguido de Honduras y Canadá.
Los que crecimos con este futbolista a finales de la década de los 90 guardamos un gran recuerdo de él. Elegante, habilidoso y con llegada a gol. Gheorge Craioveanu, más conocido como Gica Craioveanu, nació el 14 de febrero de 1968 en Hunedoara, Rumanía. Allí debutó como futbolista profesional en el Metalurgistul Slatina a la edad de 20 años. Militó durante dos temporadas, la 88-90, hasta recalar un año en el Drobeta Tr. Severin rumano.
Su buen rendimiento le permitió fichar a la temporada siguiente por el equipo que le consolidó antes de recalar en la liga española: el Universitatea Craiova de Rumanía. Se consolidó como futbolista durante cuatro temporadas hasta que la Real Sociedad se fijó en él, en el verano de 1995.
Con los txuri urdin jugó 90 partidos durante tres temporadas, las cuales metió 26 goles. Durante ese período trabajó a las órdenes de dos entrenadores ilustres en este país: Javier Irureta (95-97) y Bernd Krauss (97-98).
En plena veteranía, ya con 30 años, fichó en la temporada 98-99 por el Villarreal, histórico de nuestra liga que acababa de ascender a la máxima competición del fútbol nacional. Durante cuatro temporadas conquistó a los aficionados castellonenses a base de entrega y goles. Pasó a la historia del submarino amarillo por ser el jugador que marcó el primer gol en Primera División para el Villarreal. Tuvo lugar en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid, anotó el 0-1 pero su equipo acabó perdiendo por 4-1.
En el debut en el Madrigal también tuvo su regalo, marcó ante el Celta de Vigo. Por aquel entonces, el club amarillo estaba entrenado por José Antonio Irulegui, entrenador que no evitó el descenso del equipo a la segunda divisón. Gica permaneció un año en la categoría de plata, dando muestras de su lealtad al equipo y siendo partícipe del segundo ascenso a Primera de los valencianos. Sumó en su etapa con los amarillos un total 28 goles en en 117 encuentros totales.
En la temporada 2002/2003, cambió de aires y fichó por el Getafe CF, equipo que pertenecía a segunda. Cuatro temporadas de experiencia en el club azulón, siendo uno de los héroes del ascenso a Primera División, ya en la temporada 2003/2004. Acumuló un total de 16 goles en 100 partidos. Tanto es el aprecio que le guardan en Getafe, que en la ciudad figura una estatua del hispano-rumano. Su retirada se confirmó tras el paso por el club azulón, pero acto seguido pasó a formar parte del fútbol sala en las filas del Boadilla madrileño.
Tras su retirada hizo sus pinitos en el mundo de la política. En el año 2007, se presentó a las elecciones municipales de Getafe como segundo cabeza de lista para el Partido Popular, perfilándose así como responsable del área deportiva del partido. Renunció poco después a su acta de concejal por motivos personales y por no haber podido gobernar.
En la selección de su país no acabó de triunfar, disputó 23 partidos con 4 goles logrados. Eso sí, tuvo el privilegio de disputar el mundial de Francia de 1998, cayendo en octavos por 1-0 ante la poderosa Croacia de Davor Suker.
En la actualidad colabora en la Sexta desde hace varios años como comentarista deportivo, combinando también su rol en Onda Cero, en el programa nocturno de Al primer toque con Héctor Fernández.
Si me dijeran que el mayor espectáculo del mundo está en una final de la Super Bowl, haría oídos sordos. Nos ganarán en marqueting y merchandising, pero no existe en el planeta tierra mayor rivalidad que la de estos dos equipos. Es incomparable, bueno eso sí, el 7 de octubre será recordado como el día en el que arrancó la final por la lucha del anillo, el de la BBVA.
Fue un partido digno de mirar, en las próximas semanas seguirán retumbando los ecos del clásico hasta que en un abrir y cerrar de ojos volvamos a encontrarnos con una batalla mayor a principios de marzo, si es que no se enfrentan antes en Champions o Copa del Rey.
El partido que despertaba desde hacía semanas connotaciones políticas, fue fiel a su naturaleza y el fútbol se apoderó del espectáculo, dando a la política un segundo plano. El Camp Nou presentó un lleno absoluto, y una senyera de 98.000 cartulinas hicieron posible un asombroso mosaico con el lema de Barça!.
En lo deportivo, Tito Vilanova improvisó con una defensa de urgencias formada por la pareja de centrales Mascherano y Adriano, debido a las ausencias por lesión de Carles Puyol y Gerard Piqué. El equipo lo notó porque el Real Madrid se volcó en área local en los primeros compases de la primera y segunda mitad del encuentro. Para rematar la enfermería blaugrana, Dani Alves se tuvo que retirar lesionado en la primera parte y estará tres semanas de baja por una lesión muscular en el muslo de su pierna izquierda.
Con el brasileño aún en el campo, el Real Madrid fabricó las ocasiones de Sergio Ramos en la salida de un córner, así como la jugada del gol de Cristiano o la ocasión de Benzemà al palo. Los blancos abrían el marcador con una asistencia del francés a Cristiano que este remataba a placer al palo corto de Valdés. Sólo un minuto más tarde, Benzemá enviaba el esférico al larguero con un correspondiente rebote de Di María que lanzó fuera, que en caso de haber subido el 0-2 en el marcador, los blancos, posiblemente, hubieran saboreado la victoria y una jugada para enmarcar. El argentino demostró anoche, una vez más, que ya ha superado a Benzemà y Higuaín en el peso del equipo.
La tónica del partido cambió en ese momento y una solidaridad defensiva por parte de Pepe con Xabi Alonso, permitió a Messi aprovechar el mal despeje del portugués para subir el empate. El 1-1 abriría la segunda mitad con el Real Madrid calcando la primera parte, pero un golpe franco directo de Lionel Messi daba alas al conjunto de Tito Vilanova con el 2-1. Es el segundo gol consecutivo de falta del astro argentino ante el Real Madrid, tras el conseguido en la Supercopa de España. Una vez más, el argentino se echó el equipo a la espalda. Sólo por su juventud y que siga en activo, evita a que podamos decir libremente que es el mejor jugador de todos los tiempos.
Hasta ese momento, todo se le volvía a poner en contra a Cristiano Ronaldo. Su máximo rival en la disputa por el Balón de oro ya le aventajaba en un gol por el pichichi de la BBVA. Incluso, un intento acrobático de chilena en la salida de un córner que el portugués no supo rematar bien y que casi le causa una lesión en su hombro izquierdo, auguraba ser portada en los medios de todo el mundo como "el perdedor". Ya me lo imaginaba, fotos circulando por las redes sociales con Cristiano como la nueva estrella del Cirque du Soleil. Sin embargo, si hay un futbolista que sabe sobreponerse a cualquier adversidad ese es Cristiano. En el 66, una asistencia magistral de Mesut Özil -buen rendimiento siempre ante los blaugranas- al espacio del área rival, permitía a Ronaldo plantarse ante Valdés y obtener el gol del empate. Ahora a Cristiano se le plantea un nuevo reto: ¿Serás capaz de conseguir un gol de falta ante el Barça?. Como diría el personaje Barney Stinson en How I met your mother: "¡Challenge accepted!".
La rivalidad Argentina-Portugal, nuevamente igualada. El partido acababa en empate con un Mourinho asegurando, minutos antes, el resultado con el cambio de Essien por Di María.
El Barça se favorece con el resultado, sigue a ocho puntos de su eterno rival y, comparte liderato con un espléndido Atlético de Madrid que ve, en Radamel Falcao, a su particular oxígeno liguero. Ocho tantos en liga, repartiéndose el pichichi con Messi y Cristiano; muestra que conquista a pasos gigantes el corazón de los españoles.
Campo, gracioso dentro y fuera de él. Iván Campo Ramos, 38 años, natural de San Sebastián. Conocido por muchos aficionados de este país como el central que no encajó en su paso por el Real Madrid. Injusto en su parte, porque no se puede calificar de suspenso la trayectoria de un jugador cuando ha jugado en uno de los clubs más prestigiosos del mundo y tiene en su palmarés una Liga (2001), una Supercopa de España (2001), dos Champions League (2000 y 2002), y una Copa Intercontinental (1998).
Sin duda, el título más recordado el conseguido en el año 2000, en Saint Denis, en la final española ante el Valencia de Héctor Cúper, que acabó llevándose el Madrid, entrenado en aquel entonces por Vicente Del Bosque, por 3-0. En esa época, el vasco que contaba con tan sólo 26 años se encontraba en el nivel más alto de su carrera. Formó en esa temporada gloriosa para los blancos junto con Fernando Sanz e Iván Helguera, aquel famoso dibujo táctico del 5-3-2, con Helguera ejerciendo de libero. Sistema que le dio el más alto de sus tributos como jugador. Dos años antes por eso, en Tokyo, protagonizó unas de las imágenes más perjudiciales en su carrera deportiva. En plena sesión de entrenamiento , antes de la disputa de la final de la Copa Internacional ante el Vasco de Gama, acabó llegando a las manos con su compañero de equipo, el holandés Clarence Seedorf.
En la Selección Española pasó desapercibido, pero disfrutó del privilegio de acudir a un mundial, el de Francia 1998. Javier Clemente le convocó para dicha competición e incluso fue titular en el partido inaugural ante Nigeria, donde España sucumbió ante los africanos por 3-2, no disputando el donostiarra más encuentros en todo el campeonato.
A la edad de 29 años ficha por el Bolton Wanderers. Allí militó durante cinco temporadas, siendo estas las más gloriosas en cuanto a reconocimiento como futbolista se refiere. Coincide con jugadores de la talla de Bruno N'Gotty, Youri Djorkaeff, con su compañero en el Real Madrid, Nicolás Anelka, así como con el nigeriano Jay-Jay Okocha. Cinco años que sirvieron para ver a un rejuvenecido Iván Campo, ocupando el rol de mediocentro, y siendo uno de los jugadores más queridos por la afición Wanderer; tanto que muchos acudían al Reebok Stadium disfrazados con pelucas rizadas en tributo a su estilo de pelo.
Tan bueno fue el rendimiento de Campo en Inglaterra que en la propia web oficial de la Premier League fue considerado un jugador de talento, con capacidad organizadora y olfato de gol. Es curioso pensar que la mayoría de centrocampistas van retroceciendo con el paso de los años su posición, convirtiéndose muchos de ellos en defensas centrales. Los casos más sonados, los de Fernando Hierro e Iván Helguera por el Real Madrid o el de Loren en la Real Sociedad. En la actualidad al futbolista del F.C. Barcelona, Sergio Busquets, se le augura el mismo futuro. El donostiarra, en cambio, experimentó todo lo contrario cuando el ex técnico de los Wanderers, Sam Allardyce, apostó por él en la medular del equipo.
Otra muestra de cariño de la afición inglesa hacia el jugador queda recogida en la localidad de Preston, al oeste de Inglaterra, donde un grupo de música indie rock lleva estampado su nombre en la banda: Ivan Campo. Y como anécdota curiosa dado su carácter extrovertido y amigable, la marca de refrescos sin burbujas, Trina, volvió a recordar al aficionado español la figura de Campo con un anuncio original en el que dos jóvenes, entre otras cosas, reconocían con orgullo la imagen de la cara del futbolista tatuada en el pecho. Un anuncio adecuado al carácter del vasco, capaz de hacer levantar a las personas con la autoestima baja.
Finalizó su etapa en Inglaterra, en el Ipswich Town de la Championship, la segunda división inglesa. Tras estar seis meses sin equipo acabó fichando por el AEK Lárnaca chipriota, equipo al que ayudó a ascender a la primera división nacional en el mes de mayo del año 2010.
En la actualidad, milita en el CF Gandía, conjunto alicantino de la tercera división española, pero tiene su residencia en Mallorca. Enganchado a las redes sociales, cuenta con más de 20.825 seguidores en twitter donde presenta al mundo su biografia con ciertas pinceladas budistas y con alguna que otra falta ortográfica: "Solo el ser humano tiene la opotunidad de encontrar una medida de paz q todos buscamos y muy pocos encontramos". Para quienes quieran seguir en twitter al ex jugador de élite al que muchos de sus ex compañeros guardan un gran recuerdo de él, la dirección es @ivan_campo.
